La Comandancia de Carolina confirmó que patrulleros acudieron al comercio para indagar sobre el altercado, registrado justo cuando los ciudadanos se preparan para acudir masivamente a las tiendas para aprovecharse de las ofertas del tradicional Viernes Negro.
De inmediato, la Policía no ofreció detalles sobre la pelea en la citada tienda, pero agentes estatales investigaban la querella.
El superintendente interino de la Policía, Héctor Agosto, informó temprano que unos 3,150 agentes participarán en rondas de vigilancia especial durante esta madrugada, cuando comienzan de lleno las ofertas promocionadas principalmente como regalos navideños.
Agosto aseguró que habrá un oficial designado en cada comandancia para atender problemas relacionados a las ventas especiales.
Según Agosto, se tendrá vigilancia en los predios de complejos de tiendas y se pondrá en vigor un plan de seguridad vial en tramos cercanos a los centros comerciales.
"(El plan) va dirigido a a que sea notable la presencia de la Policía en la calle", puntualizó Agosto en conferencia de prensa conjunta con los secretarios de los departamentos de la Familia y de Asuntos del Consumidor, Idalia Colón y Nery Adames, respectivamente.
El año pasado, durante la venta del madrugador, imperaron situaciones tensas matizadas por gritos, empujones entre gente ávida de entrar a algunas tiendas donde se reguló el acceso inicial y en ciertos forcejeos hubo daños a la planta física como vitrinas rotas.
En noviembre de 2012, esa madrugada de ofertas especiales tras el Día de Acción de Gracias, en Walmart de Bayamón ocurrieron dos incidentes con padres antepusieron la seguridad de sus hijos para cazar ahorros en ciertos productos.
José Cruz, un paramédicos que se encontraba en esa tienda, contó que se le acercó a una pareja que tenía a un niño de 15 días de nacido para advertirle sobre el peligro que representaba para el menor el ambiente de tumulto en la fila. Pese a que le advirtió a la pareja que incurría en conducta de maltrato, esta permaneció en la fila.
En la misma tienda se reportó el caso de una niña de siete años que se enfermó con fiebre.
Aunque a los padres se les ofreció transportación para llevarla al hospital, estos rechazaron la ayuda.
Fuente: El Nuevo Dia
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